yo suelo creer q cuando uno quiere muchísimo algo, entonces en el momento justo se le presenta la oportunidad de alcanzarlo. no aparece milagrosamente (bueno, a veces sí) sino q uno tiene q saber darse cuenta y jugarse para conseguirlo. pero (hablando por mí por lo menos) siempre pasa.

en plena época de caos, donde hay miles de cosas para hacer y planear, se me vuelve a aparecer la oportunidad de cambiar, transformar mi (nuestra) rutina nuevamente.

no quiero contar mucho porq por ahí se termina no dando al final, pero ya me jugué y lo que es un hecho es que dejo la oficina. dejo de levantarme a las 6am y dejo de hacer papeleos y papeleos. dejo de ver también a un grupo de gente maravillosa, q hasta ahora no termina de sorprenderme. ésta parte es la que más me duele dejar.

pero si todo sale bien, voy a estar cerquita cerquita de mi independencia total! y lo más importante: voy a estar cerquita de mauro y yami todo el tiempo…

y entre medio… las mesas!!!